Prohibición de alcohol en Limone: ¡orden para los turistas en el lago de Garda!
Limone sul Garda introduce una prohibición del alcohol para reducir el exceso de turismo y la contaminación acústica. Existe riesgo de multas de hasta 500 euros.

Prohibición de alcohol en Limone: ¡orden para los turistas en el lago de Garda!
La pintoresca ciudad de Limone sul Garda, en el lago de Garda, ha impuesto una prohibición temporal del consumo de alcohol para hacer frente a los desafíos del aumento del turismo. Esta prohibición, que entró en vigor el 19 de abril de 2025 y tiene vigencia hasta el 1 de noviembre, prohíbe la posesión y consumo de alcohol en espacios públicos como calles, plazas y parques. El objetivo del municipio es poner orden a través de esta medida y mejorar la relación entre locales y turistas. Las infracciones de la prohibición del alcohol pueden dar lugar a multas que oscilan entre 25 y 500 euros, aunque se aplican excepciones para eventos autorizados.
Limone sul Garda no es el único destino turístico en el lago de Garda que se enfrenta a los desafíos del sobreturismo. Este popular centro turístico atrae desde hace muchos años a turistas alemanes y, al igual que muchos otros destinos como Sirmione, lucha con un número cada vez mayor de visitantes. En Sirmione, debido a la afluencia masiva de turistas el primer fin de semana de mayo, se produjo un caos de tráfico, lo que llevó a un debate sobre posibles tarifas de entrada al casco antiguo. El acceso a la ciudad se realiza a través de un único puente, que posteriormente tuvo que cerrarse parcialmente, lo que obligó a los visitantes a esperar hasta 40 minutos para entrar.
Medidas contra el hacinamiento
Ante esta situación, los hoteleros, residentes y comerciantes locales piden medidas inmediatas para evitar incidentes similares en el futuro. El consejero de Seguridad, Massimo Padovan, ya ha propuesto un sistema de reservas para los días punta. La ciudad también está planeando una revisión del sistema de estacionamiento y mayores controles. Sin embargo, la alcaldesa Luisa Lavelli aclaró que no se ha tomado ninguna decisión final sobre la introducción de tarifas de entrada. Se podría considerar un lanzamiento ya este verano.
En la costa oeste del lago de Garda, Limone sul Garda también intenta combatir la contaminación por residuos, la contaminación acústica y el vandalismo con la prohibición del alcohol. La policía y los agentes del orden controlarán el cumplimiento de la prohibición para garantizar una mejor calidad de estancia para todos los huéspedes.
Como lo demuestran los acontecimientos actuales, las medidas tomadas por las comunidades del Lago de Garda son una señal del desafío de encontrar el equilibrio entre el turismo y la calidad de vida de los lugareños. Estas regulaciones podrían ser innovadoras para otros destinos turísticos superpoblados que también sufren las consecuencias del transporte masivo.